Primero lo que debes saber acerca de tu jabón es que todos los jabones naturales son elaborados con aceites vegetales, cada jabonero elige los aceites a su gusto y dentro de los más comunes encuentras oliva, coco, palma, soya, girasol, ricino, entre otros y mantecas que les llamamos así por su estado sólido como la karité, mango, cerdo, etc.
Los Jabones naturales son eso, "NATURALES", no contienen ningún químico ni detergentes que puedan dañar la piel, tampoco contienen ingredientes para aumentar su dureza y mejorar el tiempo de vida en anaquel, tampoco pasan por un proceso artificial en su elaboración.
Hay jaboneros de glicerina, la glicerina es ya una base de jabón lista para derretir y agregarle aroma, color, ingredientes activos (colageno, vitaminas, extractos, etc) ingredientes como exfoliantes, o adornos. Este proceso también es parte de los jabones naturales.
A lo que íbamos, todos los jabones naturales deben cuidarse más que el jabón comercial, ya que pueden perder sus propiedades más rápido que los otros. Debes mantenerlos alejados de la humedad y el sol, especialmente los de glicerina, éstos si no están completamente tapados, sudan por ser higroscópicos. Nuestros jabones al ser saponificados no sudarán pero si pueden perder su aroma con el tiempo, así que aquí te van nuestras recomendaciones:
No los saques de la bolsita, esto los protege del sol y evitarás que pierdan su aroma
Cuando te bañes con ellos, utiliza una jabonera que tenga agujeros para que tengan buen drenaje y no les quede "charquito" de agua para que no se deshagan.
Déjalos lejos del corrimiento del agua. Esto evita que el jabón se deshaga rápidamente y se mantengan secos
Al seguir estos simples consejos, harás que la vida de tus jabones naturales sea más larga y los disfrutes por más tiempo.
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